Ayer tuve una sesión de fotos con Mónica, una chica que tenía ilusión de hacerse unas fotos de tipo Fashion, sin más intríngulis. Ella, por su forma de vestir, tiende al gótico pero digamos que se queda en un románico de transición. La verdad, para ser la primera vez que posó en un plató bajo la cobertura de flashes y demás parafernalia, es que no lo hizo nada mal; al revés, lo hizo muy bien.
Jueves 25 de febrero – «Posición B» en el Monty Ambigú.
El jueves, 25 de febrero, a las 20,30 horas, se inaugura en el Monty Ambigú la exposición fotográfica de POSICIÓN B, Subrealismo e Abstracción, que a buen seguro no dejará a nadie indiferente. POSICIÓN B es un referente fotográfico sólido, con muchos años de recorrido. En esta ocasión se exponen las obras de cinco de sus miembros: Gonzalo Varela, Eduardo Castro Bal, Javier Sanz, Marcos Cerejido y Jesús Manuel Giz Novo. Una oportunidad para compartir este momento charlando de fotografía mientras se degusta un vino o un café.
LINUX «dos meus amores»…
Hace bastantes años anduve trasteando con el sistema operativo Linux, en una relación de amor-odio que acabó en una absoluta y total indiferencia. Años significan años, me refiero a las épocas trogloditas de la informática en las que proliferaban los procesadores i8088 e i80286. Las instalaciones crudas, la dificultad de instalación de periféricos, los programas de aspecto carpetovetónico, etc… me hicieron dejar de lado el Linux. Además se añadió otro factor: la aparición de las cámaras digitales y el procesamiento del RAW. Eran épocas gloriosas en las que el RAW se revelaba a golpe de comandos e interruptores dentro de una consola. Gimp, el sucedáneo de Photoshop arrancaba por esos tiempos, aparecieron entornos gráficos para procesar el RAW: DcRaw, UfRaW… pero no eran rivales del Adobe Camera RAW (ACR) del entorno Windows, al menos en comodidad y eso que llaman «flujo de trabajo amistoso y rápido».

El Raspberry Pi. Un nano ordenador que hace cualquier cosa y más… Tiene varios «dongles» puestos: WiFi, Bluetooth, teclado y ratón inalámbricos…
El montaje.
Uno de los momentos mágicos de una exposición es el del montaje. Se hace con la ilusión de que tus fotos van a quedar al resguardo de unas manos que han confiado en ti y en tu trabajo. Muchos de ellos son contrarreloj; son las cuatro y se inaugura a las 8. Instantes febriles en los que siempre hay algún detalle que hace saltar las alarmas: esta foto aquí no encaja y comienzan las permutaciones, falta un gancho, se me olvidó la masilla de pegar rótulos, aquella foto está torcida. Lo peor… un cristal o unos cristales rotos accidentalmente en el viaje. ¿Dónde hay una cristalería de guardia cerca?…
Paso a paso el montaje avanza. Al final la expo está montada antes de lo que uno pensaba. Queda tiempo… ¿hay una cafetería por aquí cerca?.

Manolo Díaz a la derecha. Un amigo de épocas pretéritas que siempre está dispuesto a echarme una mano. Foto: Almudena Marcos – Museo del Humor.
PRENSA – Visita de alumnos a la exposición en el Museo del Humor de Fene.
Los dos periódicos ferrolanos (Diario de Ferrol y La Voz de Galicia (Edición Ferrol)) recogen, en la edición impresa de hoy, la visita que realizaron 130 alumnos a la exposición que tengo activa en el Museo del Humor de Fene. Toda una satisfacción explicar a estos pequeños el contenido y significado de mis fotos.




